Hoy
es veintinueve
Ayer
lo fue también
Y
mañana lo será una vez más.
La
eternidad no puede escribirse en números, solamente le damos un
aproximado al que más nos convenga.
Cuando
te tenía, la eternidad parecía algo que no iba a alcanzar para
disfrutar de ti.
Dos
fueron las veces que te vi sin saber quien eras.
Nueve
fueron las veces que me cerraste los ojos y te conocí mejor que mi
propia mano.
Nunca
creí que iba a ser amante de un café en la mañana, un vino por la
tarde y tus besos de poesía por la noche.
Veinte
botellas de vino guardamos en nuestra bodega personal. mientras que
Nueve
canciones me cantaste mientras veíamos menguar la luna
Supe,
gracias a ti, que tenemos vidas pasadas y a su vez vidas futuras.
Solo
que no sé como hacer para encontrarte en todas las próximas.
Veintinueve
los cigarrillos que consumió el camino.
Cero,
los caminos que quiero recorrer sin ti.
Te
paseas libremente maravillando a estrellas y planetas, tal como haría un cometa.
Y yo admirándote, con mis pies clavados a la tierra tratando de
alcanzarte.
Veintinueve
las veces que moriría por ti si fuese necesario.
Y
veintinueve los días que te tuve junto a mí.
Hoy es 29.